Existen diferentes tipos de comunidades verdes que ponen en práctica iniciativas comunitarias como pueden ser medios de transporte sostenible, compras colectivas, huertos comunitarios, etc..
Las comunidades con enfoques ecológicos desempeñan un papel destacado en la aplicación y legitimación de comportamientos respetuosos con el clima y, además, tienen el potencial de demostrar y difundir las mejores prácticas en materia de mitigación y adaptación al cambio climático. Las comunidades más comunes y conocidas son las siguientes
- Comunidades de compra: compras comunitarias, directamente a agricultores y productores.
- Talleres comunitarios. Por ejemplo: proyectos comunitarios de reparación/reciclaje.
- Comunidades de jardinería (huertos comunitarios).
- Granjas comunitarias